El libro que tiene el lector en pantalla cabe entenderse como un ensayo que da continuidad a un título previo, Dos veces bueno. Breviario de aforismos y apuntamientos, publicado en 2014, si bien, y en sentido estricto, no es una continuación del mismo, a pesar de lo que su título pueda sugerir o incluso tácitamente auspiciar.
En verdad, existe un parentesco en la estructura y composición de ambos trabajos, el anterior y el presente, en los cuales el aforismo y el relato breve cumplen la función de sujeto agente que los recorre en buena parte de su trazado. No es menos cierto que tampoco en esta ocasión ha podido el autor resistirse al encantamiento que le producen los juegos de palabras, la escritura juguetona, y acaso también asaz revoltosa, artes y oficios del escribir que ansía no abandonar, ni que le abandonen, porque constituyen el abracadabra de la escritura aforística.
El presente ensayo además de aforismos, en la acepción clásica del término (reunidos en la Sección I «Llenando el aforo»), ofrece al lector ‘relatos con retratos’: «Pases especiales», según consta en el Índice como Sección II; esto es, breves narraciones sugeridas por la visión de una imagen o viceversa. Aunque sólo fuese por este motivo, puede considerarse Aforo ilimitado un libro ilustrado.
En verdad, existe un parentesco en la estructura y composición de ambos trabajos, el anterior y el presente, en los cuales el aforismo y el relato breve cumplen la función de sujeto agente que los recorre en buena parte de su trazado. No es menos cierto que tampoco en esta ocasión ha podido el autor resistirse al encantamiento que le producen los juegos de palabras, la escritura juguetona, y acaso también asaz revoltosa, artes y oficios del escribir que ansía no abandonar, ni que le abandonen, porque constituyen el abracadabra de la escritura aforística.
El presente ensayo además de aforismos, en la acepción clásica del término (reunidos en la Sección I «Llenando el aforo»), ofrece al lector ‘relatos con retratos’: «Pases especiales», según consta en el Índice como Sección II; esto es, breves narraciones sugeridas por la visión de una imagen o viceversa. Aunque sólo fuese por este motivo, puede considerarse Aforo ilimitado un libro ilustrado.
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